Sobre ser instructor

De los fallos se aprende. Y del tiempo haciendo cosas, también se aprende. Estas son mis conclusiones, pasado el tiempo, tras cuatro Semanas Tácticas Solidarias (STS), una Semana Táctica (ST) y varios cursos en el ámbito civil totalmente ajenos a mi profesión militar acerca de lo que supone presentarse como “ instructor ” delante de un grupo de alumnos. Y lo importante que es. De los fallos aprendí que es mejor ir por libre y ser uno mismo. Debo reconocer que me cuesta referirme a los que vienen a estas formaciones como “ alumnos ”. Siempre me ha pasado porque no me considero un maestro, un maestro tiene alumnos; yo sólo explico cómo hago las cosas . Ocurrió tras la primera Semana Táctica Solidaria en Algeciras. Me sorprendía cuando me contactaban y me preguntaban de cara a la segunda STS ¿qué das tú? Y se repitió en la siguiente STS, y en la ST: “ oye Arturo, ¿tú qué das? ”. Y me agradaba pero en cierto sentido me daba miedo porque cuando más de una persona te pregunta eso es que ...